¿Cuándo
me comunico eficientemente?
Cuando
mi mensaje es concreto y específico,
cuando
soy respetuoso con el otro,
manteniendo
mi postura relajada,
y, mi
tono de voz seguro.
¿Cuándo
más? …
Cuando escucho con atención.
Cuando escucho con atención.
ACTIVIDAD DEL LIBRO- El lenguaje nos sirve
para comunicar lo que sentimos y pensamos. Podemos elegir las palabras y la
forma más adecuada de hablarnos a nosotros mismos y a los demás.
Sigue con tu compañero: Uno hará de sujeto y otro de observador. El sujeto
se dice a sí mismo en voz alta: “Qué torpe soy” (o algo parecido, que alguna
vez se haya dicho). El observador se fija en su fisiología: cara, gestos,
movimientos, postura, etc. Seguidamente el sujeto se dice algo positivo: “Soy
un fenómeno” (o algo que habitualmente se diga) y el observador vuelve a fijarse
para notar los cambios. Después cambiáis los papeles.
¿Qué habéis notado?
ACTIVIDAD DEL LIBRO- Vas a escuchar cómo
es tu voz interior para conocerla más: su volumen, su velocidad, su tono, su
ritmo, su timbre.
Recuerda algún ejemplo en el que te hayas dicho algo
positivo, y otro en el que te hayas dicho algo negativo. Anota en una hoja las
diferencias que notas en tu conversación interna y cómo te sientes cuando te
escuchas.
¿Qué diferencias has notado en cada uno de los ejemplos?
Cómo te hablas, influye en lo que
sientes. ¡De ti depende hablarte de una manera cariñosa!
No hay comentarios:
Publicar un comentario